Este año la temporada ha sido muy demandante para los equipos y pilotos de la Fórmula 1. Pero ha habido un equipo que, si bien al inicio le costó un poco, ha logrado mantenerse arriba, puntuando y con gran diferencia con respecto a los otros equipos: Red Bull Racing.
Red Bull logró revertir su déficit de rendimiento de inicios de temporada contra Ferrari y superarse tanto en la tabla de pilotos como en la tabla de constructores. Pero ¿cómo lo han hecho exactamente?
Los patrones de rendimiento entre Red Bull y Ferrari este año han estado muy reñidos. El lugar donde las cosas cambiaron y se tuvo un nuevo equipo líder, Rebdull, y un nuevo piloto líder, Max Verstappen, fue el Gran Premio de España del 22 de mayo, en el circuito de Catalunya, Barcelona. En esta carrera las tablas se invirtieron: Ferrari dejó de liderar la tabla de constructores y Charles Leclerc dejó de ser el primer piloto en la tabla.
Cabe mencionar que el rendimiento del coche de Ferrari seguía y sigue siendo muy bueno. Después de Barcelona se podía notar por las qualis y varios tests, que Ferrari seguía siendo, por una leve diferencia, el coche más rápido. Pero llegaría el cambio y la dominancia completa del equipo austriaco empezaría en el circuito de Paul Richard, en Francia, el 24 de julio.
El equipo austriaco tuvo una batalla muy complicada el año pasado con Mercedes para saber al final del 2021 quién era el mejor. Esto desató una de las competencias más reñidas de la historia de Fórmula 1. Max Verstappen (Red Bull) y Lewis Hamilton (Mercedes) se enfrentaron por el campeonato y hasta la última carrera en Abu Dhabi no se podría haber sabido quién iba a ganar. Hamilton había sido campeón de la F1 por siete años consecutivos en el equipo de Mercedes, y este coche, en ese año, era el más rápido.
Además, el piloto inglés ya tenía mayor experiencia en cuanto a campeonatos. En cambio, Max Verstappen, con 24 años, habiendo entrado a la Fórmula 1 en 2015, primero en Toro Rosso y luego en Red Bull, tenía muchas ganas de ganar. Estar cada vez más cerca de la victoria lo motivaba a seguir; su coche, además, era de los más rápidos. Adicionalmente, se podía notar la naturalidad y agresividad con la que manejaba para su edad. Por estas razones nadie sabía quién iba a ser campeón. Hasta podría haber sido cuestión de suerte. Finalmente, Max ganó y se coronó como el campeón mundial del 2021. Pero este año está siendo muy distinto.
Primero porque hay un nuevo rival: Ferrari. Un equipo que lo tenía todo este año para estar en la cima. Tenía “el” coche y “los” pilotos. Para dar un poco de contexto, desde el año pasado Ferrari había comenzado a planear su coche del 2022, con las distintas regulaciones que debía tener, pues sabía que no iban a ganar el campeonato (la competencia estaba muy reñida entre Redbull y Mercedes). Entonces, optó por adelantarse y diseñar su carro con más detenimiento. Además, sus pilotos son de los mejores de la parrilla. Así que todo daba a entender que este iba a ser el año de Ferrari, y así comenzó… pero lamentablemente no duró mucho.
Lo que convirtió a Red Bull en el equipo dominante no solo fueron las mejoras que hizo al paso de los circuitos, y el hecho de que los pilotos se estaban adaptando, sino su plan de estrategias versus el de Ferrari.
Como siguiente punto: no hay tanta competencia como antes. Pese a que este año los coches estaban diseñados con las regulaciones para que pudiera haber mayor competencia, y la audiencia pudiera disfrutar de más variedad de ganadores por circuito y más pases, no ha habido tanta variedad. Hoy en día se podría decir que tanto Red Bull como Max Verstappen están inalcanzables.
El piloto de Países Bajos se encuentra en el primer lugar, con 335 puntos, y su mayor rival este año, Charles Leclerc, en segundo lugar, con 219 puntos. Red Bull está posicionándose también en el primer lugar en la tabla de constructores, con 545 puntos. Ferrari está en segundo lugar, con 406 puntos. Hay bastante diferencia, y a estas alturas del campeonato es muy difícil revertir las cosas a como estaban a inicio del año, con un Ferrari prometedor liderando y al monegasco Charles Leclerc, de la misma edad de Max, siendo el primero en la tabla de pilotos.
En tercer lugar, como lo mencioné brevemente antes, las estrategias son vitales para todos los circuitos en Fórmula 1, y esto quizás no todos lo sepan. Puede ser que un equipo tenga el mejor coche y los mejores pilotos, pero si no tiene una buena estrategia al momento de las carreras, lo anterior no sirve; o al menos no te lleva al primer lugar, a la championship. Dicho esto, una parte muy importante del equipo de Red Bull es Hannah Schmitz, la jefa de estrategia del equipo austriaco. Ella es la responsable de muchas victorias de Max, actual campeón mundial.
Lo que hace un jefe de estrategia es pensar en métodos para poder ganar la carrera, optimizando todos sus recursos dependiendo de cómo vaya la carrera, valga la redundancia. Ya sea por un safety car, por alguna bandera roja o por accidentes, o por la decisión de en qué momento es más conveniente cambiar las llantas y por cuáles. Son como el cerebro del equipo y sus decisiones pueden afectar el resultado de la competencia. Son piezas muy importantes.
Está de más mencionar la calidad de pilotos que tenemos este año, principalmente los cinco primeros, con un excelente rendimiento. Max Verstappen está en su pico, probablemente mejor que nunca: su método de manejo y su personalidad encajan con el perfil de lo que Red Bull quiere en un piloto. Es el matrimonio perfecto. Por esto es que Verstappen firmó un contrato hasta 2028 con Red Bull, y en muchas entrevistas ha dicho que espera ganar muchos más campeonatos con ellos. Sin duda alguna, es el piloto del momento y, probablemente, este 2022 sea nuestro campeón mundial por segundo año consecutivo.