Más que una promesa, Brianna Barthelmess es ya una figura del surf peruano por los logros que viene alcanzando a su corta edad. De la mano de su padre, César Barthelmess, quien la acompaña desde muy pequeña en este deporte, la joven sanbartolina continúa subiendo de nivel para seguir cosechando triunfos.
Escribe: Gabriela Sandoval
Fotos: Jhonatan Saavedra
Brianna Barthelmess Burns tiene 13 años y más de la mitad de su vida en el mar sobre una tabla. Su papá, César Barthelmess, inculcó en ella el amor por el surf, el cual practica todos los días desde hace muchos años. Brianna, a su corta edad, es reflejo de esa disciplina que la lleva a dedicar largas horas en el mar de San Bartolo para mejorar cada día y destacar entre competidores que la superan en edad.
Es tricampeona del Circuito Latinoamericano Semillero Olas Pro Tour 2024, que se disputó en su última fecha en mayo en la playa Macumba, Río de Janeiro, Brasil. Ganó en las categorías Sub-18, Sub-16 y Sub-14, clasificando al primer encuentro deportivo en Portugal en la categoría Sub-14, en el que competirán diferentes surfistas juveniles de talla internacional. Este año participó también del ISA World Junior Surfing Championship que se realizó en las playas El Sunzal y La Bocana, en El Salvador, logrando el puesto 20 en la categoría Sub-18 femenina. A nivel de equipos, la selección peruana de surf ocupó la octava posición.
El año pasado Brianna ganó tres de las cinco categorías en disputa del Circuito Latinoamericano Semillero Olas Pro Tour 2023, que contó con cuatro etapas en Chile y Perú. Se trató de las categorías Sub-12, Sub-14 y Sub-18. En el Circuito Nacional de Surf 2023 obtuvo en algunas de las calificaciones un impecable 10, imponiéndose en la primera final del campeonato en la categoría abierta con tan solo 12 años, marcando un hito en la historia del surf peruano. También en el 2023 quedó décimo primera en el Mundial ISA Junior, celebrado en playa Macumba, en Río de Janeiro, en la categoría Sub-18.
Brianna abrió los ojos viendo el mar. Desde muy chiquita chapoteaba y paseaba en paddle, siempre con la mirada atenta de su padre. Cuando Brianna tenía cinco años su papá decidió que era momento de que empezara a correr tabla y poco a poco ha ido entrenando para alcanzar un mayor nivel. “Aquí (San Bartolo) o te metes al mar o no haces nada. El grupo es de 50 niños, más o menos, que corren juntos, se mueven juntos. Es una comunidad bien amigable”, señala César, quien considera que su hija empezó a destacar porque no paró en ningún momento de entrenar.
Brianna no solo ve al surf como competencia, sino como diversión y, aunque es exigente con los resultados, disfruta cuando entra al mar de principio a fin. Entrena todos los días, dividiéndose entre las responsabilidades del colegio y las de surfista. Sus padres, en especial César, la acompañan en sus viajes. Es aún muy joven para saber a qué se quiere dedicar más adelante, pero lo que sí tiene claro es que no dejará la tabla. Se siente feliz de representar al Perú y de conocer nuevas olas en diferentes países, a la par que hace amigos y sigue creciendo profesionalmente en el deporte.
Como todo deportista joven, debe conciliar sus tiempos con la escuela. Brianna va a segundo de secundaria y, aunque confiesa que es un reto estudiar y competir al mismo tiempo, lo viene logrando con éxito. “Brianna tiene una lectura de olas impecable, esa es su ventaja. Es inteligente, sabe dónde meter las maniobras; desde chiquita tiene eso, ahora lo está explotando y maximizando”, comenta César, orgulloso, mientras vemos cómo ella ingresa al mar a surcar las olas.
Dedicación y constancia
César reflexiona conmigo en esta tarde fría frente al mar. Señala que cuando estás convencido de tu capacidad, cuando crees en tu físico, se pierde el miedo y solo con eso ya estás a un paso adelante de todos. Eso es lo que le ha inculcado a Brianna desde muy niña. Ella entrena en olas grandes, y el roce internacional que ha logrado en las competencias en las que ha participado le han permitido mayor seguridad y confianza.
Concentración y temple, es lo que responde César cuando le consultamos sobre las competencias que debe tener un surfer para alcanzar el nivel de Brianna. “Todos tenemos el empuje, la constancia, la disciplina. La cosa es empezar. Mientras más temprano mejor, porque en otros países es así; tienen piscinas de olas, los mejores coaches, psicólogos, entrenadores físicos, pero no tienen las olas que tenemos nosotros”, resalta César.
Definitivamente el surf peruano continúa posicionándose y son los más jóvenes los que permitirán que ese potencial que tenemos, que a nivel de región nos ubica en segundo lugar detrás de Brasil, siga creciendo. Detrás de los triunfos de los más noveles se encuentran los padres, como grandes impulsores para obtener buenos resultados, y lo podemos ver claramente en el caso de Brianna y su papá, quien incluso se divide el entrenamiento con el coach Luis Escudero para que su hija siga avanzando en el mundo del surf.
La joven sanbartolina sueña con un mundial y a favor de este anhelo se encuentra nuestro bendecido litoral peruano con olas muy constantes, crecidas perfectas y vientos controlados, que permite a los surfistas aprovechar el mar a cualquier hora para entrenar duro y seguir buscando podios.
En tanto, Brianna continuará perfeccionando su técnica, con la mirada siempre atenta y amorosa de su padre, en un camino ascendente que estamos seguros seguirá dando de qué hablar.
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