A nivel mundial el tenis de mesa peruano es muy respetado"
Conversamos con Marisol Espineira, presidenta de la Federación Peruana de Tenis de Mesa, sobre la situación de este deporte en nuestro país, los talentos que nos representan en el extranjero y las actividades que se vienen llevando a cabo para fortalecer y posicionar el tenis de mesa peruano a nivel nacional e internacional.
Por: Andrea Franco
Fotos: Luis Cadillo y Federación Nacional de Tenis de Mesa
¿Qué acciones viene tomando la Federación Deportiva Peruana de Tenis de Mesa (FDPTM) para promover este deporte?
Por primera vez en la historia del tenis de mesa peruano tenemos seis atletas en Europa jugando profesionalmente. En paralelo, desde el 2018, comenzamos a hacer torneos importantes en Perú que han ayudado a poner en vitrina al tenis de mesa nacional. En 2022, tuvimos competencias como el Youth Contender Lima 2022, WTT Contender Lima, una serie de un mundial donde vinieron los 20 mejores del mundo.
¿Qué torneos nacionales son los que la FDPTM viene organizando?
Casi todos los clubes grandes hacen torneos nacionales que dan puntos para el ranking nacional. Estos torneos están debidamente coordinados con la federación. Por ejemplo, en mayo inicia la Copa Regatas, luego la Copa San Agustín, en Chiclayo, y así todos los clubes van organizando torneos al año. Por la pandemia tuvimos que parar y el ranking también. El año pasado fue como prueba, pero este año el ranking nacional tiene una connotación más importante porque los campeones nacionales van a la preselección del próximo año.
Y durante la pandemia ¿cómo se trabajó con los deportistas?
Al principio fue todo virtual, por ejemplo la preparación física. Para eso (los deportistas) se conectaban de manera virtual con los entrenadores y así sucesivamente hasta que ya pudimos volver a entrenamientos presenciales. Fuimos uno de los primeros deportes en regresar con todos los protocolos. Al inicio no entraron todos, solo grupos priorizados, hasta que llegamos a la normalidad.
Cercanía y apoyo para las nuevas generaciones
¿De qué manera la FDPTM está acercando el deporte a nuevas generaciones?
A través de competencias nacionales tratamos de ver los nuevos valores. Actualmente, tenemos en Videna a dos chicas. Aquí tienen alojamiento y alimentación gratuita. Una jugadora es de Ica y tiene fuerte potencial, y la otra es de Moquegua. Ahora se incorporará a un jugador de tenis de mesa de Arequipa que tiene miras al Parapanamericano de Santiago 2023. Son cosas que antes no había en el tenis de mesa. Se está haciendo la gestión para que, igual que otros deportes, puedan tener su habitación, sobre todo quienes vienen de provincia. Lastimosamente nuestro sistema deportivo nos impide apoyar como se debe a categorías menores.
¿Por qué ocurre este impedimento?
Hay una norma, por decirlo así, en el IPD, donde se apoya a mayores de 15 años. En Europa tenemos buenos competidores y acá tenemos un grupo fuerte, pero a los chicos pequeños ¿cómo los desarrollamos? Una cosa es trabajo en el club y otra es que los sigan desarrollando y los empujen a competencias de alto nivel. Para eso no tenemos presupuesto. Ahora mismo se están yendo al Sudamericano y lo máximo que puede hacer la federación es pagar un entrenador de los cuatro que van a ir. Los otros tres los pagan los padres, aparte de otros gastos como son el viaje, la estadía, etc. La federación pone la entrenadora principal, porque como son muchos deportistas, debe haber al menos cuatro entrenadores. Quisiéramos hacer más, pero a veces las personas no entienden que no tenemos ese presupuesto.
¿Se espera que se pueda apoyar a las nuevas generaciones?
En este momento la federación, lo más que puede hacer con estas competencias, para este y el otro año, es apoyar y que nos dejen algo porque el presupuesto es muy bajo. Por la pandemia se le redujo (el presupuesto) a la mayoría de federaciones y no se ha vuelto a mejorar. Yo tengo tremendo problema con el presupuesto porque debemos ir a torneos sudamericanos, a panamericanos, y todo eso equivale a dinero. Adicional a ello, actualmente los vuelos son carísimos y cuando sacas la cuenta, el presupuesto no da.
¿Qué hacen en esos casos?
Hay que mover las fichas. Por ejemplo, si se clasifica a un Sudamericano lo primero es ver el dinero, pero no hay forma de coger algo, además de que no está autorizado. En lo personal, y se lo he dicho al IPD, esto debe venir de arriba. Una vez alguien dijo que “la presidenta del tenis de mesa no apoya a los menores”. Yo no tengo nada que ver con el dinero, eso lo da el Estado. Puede haber excepciones, como un campeón sudamericano, como Carlos ‘Nano’ Fernández, que desde pequeño trajo resultados. En ese caso se le consideró como si fuera de 15 años, pero eso es otra cosa que se puede gestionar.
¿Hay algún caso similar en la actualidad?
Por ahora no es el caso. Para eso debemos tener resultados relevantes, como Nano. A él se le apoyó siempre porque tuvo buenos resultados. Son excepciones, pero de ahí, creo que el Gobierno debería revisar esta norma porque el tenis de mesa, en la actualidad, se puede jugar desde los cinco años. No puedes aplicar esta norma para todos. Hay deportes que, de repente, tu alcance máximo lo coges a los 25-30 años, pero en el tenis de mesa es distinto. Esta norma nos tiene un poco atados de manos, porque necesitamos ayudar a los jóvenes y sobre todo a gente de provincia que invierte en este deporte. Yo he sido deportista y sé lo que es que tus padres te paguen todo.
Estabilidad profesional y rentabilidad de los deportistas
¿Es rentable ser tenismesista en el Perú?
Es rentable cuando te colocamos en un club en Europa. En estos momentos los que están allá están ganando su dinero; no mucho, pero también depende de ellos. Hay muchos clubes en Europa, como en España o Francia, donde las ligas son fuertes, y los jugadores viven del tenis de mesa. La federación da un empuje, pero ya depende del jugador y sus metas.
¿Cómo les va a los tenismesistas peruanos en el extranjero?
Esta vez se han ido dos más: Isabel Duffoo, la número uno de toda competición femenina, y Rodrigo Vigo, que está en España, y tiene un buen desempeño. También está Nano Fernández, que tiene beca panamericana del Comité Olímpico Peruano y tiene su PAD (Programa de Apoyo al Deportista, del Instituto Peruano del Deporte). Siempre vemos qué necesita. En general, tenemos un grupo fuerte dentro y fuera del país. Hay potencial en los chicos jóvenes porque tienen una meta, además ven a sus compañeros en el extranjero hacer lo que les gusta y les pagan. Entonces ellos tienen esas expectativas.
En relación a los recursos que brinda la federación ¿cuál es su estado?
Ahora estamos con una entrenadora principal y una asistente, y tenemos una licenciada fisioterapeuta. Básicamente eso. No podemos disponer de mucho más, porque el presupuesto es corto. Antes de la pandemia teníamos psicólogos, pero tuvimos que cortar ese trabajo tan importante. Muchos de los chicos tienen PAD y pagan sus terapias con un psicólogo deportivo.
Tenemos un grupo fuerte dentro y fuera del país. Hay potencial en los chicos jóvenes porque tienen una meta”
Expectativas, organización y crecimiento
¿Cuáles son los torneos más importantes de este año?
En junio tenemos el Sudamericano de mayores en el Perú, que es clasificatorio para Santiago 2023. Seguidamente tenemos un clasificatorio especial; es decir, quienes no clasifican en un Sudamericano tienen la posibilidad de dos equipos más y poder clasificar, y aun así, los que no clasifiquen tienen una posibilidad en individuales. En total son 16 días de competencia. Luego tenemos el Youth Star Contender, que es como una serie de un Mundial juvenil, que da puntuación para el equipo de 15 años, 19 años y todo competidor. Este torneo, a pesar de ser juvenil, da puntuación para el ranking de mayores y dobles mixtos. En julio cerramos con el WTT, otra vez la serie mundial, en la que vienen los 20 mejores del mundo.
¿Cómo ves el interés hacia este deporte en el Perú?
Creo que el tenis de mesa peruano ha crecido bastante en el aspecto de material humano. Antes veías la competencia con poca gente y la mayoría de Lima. Ahora no, sucede lo contrario. Sé que hay muchas cosas por hacer. Yo culmino mi labor el año que viene, y espero que quien venga mantenga lo que hemos hecho y mejore muchas cosas que faltan. Lo importante es la unión pero a veces hay mucho individualismo y eso hace que las cosas se retrasen. Sin embargo, estamos firmes. Como jugadora retirada, mi pensamiento siempre ha sido dar el mejor trato a los atletas, aunque a veces no se vea así.
¿Qué expectativas hay con los jugadores locales y la organización del tenis de mesa?
Hemos tratado de dedicarnos a que los jugadores salgan al extranjero, que se desarrollen profesionalmente, y seguir desarrollando a los locales. En provincia empezaremos un curso con la entrenadora principal de los fines de semana para capacitar de manera conjunta a los chicos y entrenadores. También vamos a empezar cursos de árbitros a nivel nacional, estamos categorizando a entrenadores. Estamos haciendo cosas que muchas personas no ven, o no quieren ver, pero nuestra idea es hacer lo mejor posible. En Legado, el tenis de mesa es visto como una federación que arma campeonatos espectaculares. Además, a nivel mundial el tenis de mesa peruano es muy respetado.
El presupuesto que tenemos es muy bajo. Por más que uno trata de recaudar con las competencias de nivel internacional que hacemos en Perú, ese dinero lo tratamos de coger para impulsar al equipo más fuerte, con miras a obtener resultados para obtener dinero”.
