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Edición Julio - Agosto 2024 Deporte nacional

Perú, es ahora o nunca

Crédito: Getty Images

Luego de su eliminación en la Copa América EE.UU. 2024, la selección nacional retoma el complicado camino hacia el Mundial 2026, con muchas dudas. ¿Podrá Fossati cambiar la mala imagen que hasta aquí ha dejado la Bicolor? ¿Será su 3-5-2 el sistema que necesita el equipo para enderezar el rumbo? ¿Son los futbolistas convocados lo mejor que tenemos?

Escribe: Rodrigo Arosemena Noltenius

Después de 29 años, la selección peruana vuelve a quedar eliminada en fase de grupos de Copa América, un torneo en el que, por lo general, nos iba muy bien. Estuvimos ausentes 36 largos años de un Mundial de fútbol, pero la Copa América siempre era un pretexto perfecto para ilusionarnos y llenar nuestros momentos rutinarios con alegrías futboleras. Desde 1997 hasta 2021, nuestra selección disfrutó de 10 ediciones seguidas superando la primera ronda. Esta vez, el rendimiento no estuvo a la altura y el equipo regresó a casa mucho más temprano de lo usual.

No es difícil apuntar a los jugadores que hoy conforman la plantilla. Tampoco cuesta entender que uno de los principales responsables de estos resultados es el propio Jorge Fossati. Sin dejar esos factores de lado, tiene que estar muy claro que el verdadero problema inicial viene desde arriba. Muchos dirigentes de la FPF no han manejado la gestión de nuestro fútbol de la mejor manera, y eso nos ha costado caro. Ya se ve cuáles son los frutos de una pésima administración liderada por Agustín Lozano.

Los problemas para la selección peruana empezaron justo después del recordado repechaje ante Australia. Gareca se marchó de la selección dejando una vara alta, pero con convicciones marcadas y un equipo que supo competir con muy poco. Era cuestión de seguir esa línea y continuar con esa idea.

El presidente de la federación, sentenciado por reventa de entradas, decidió que el indicado era Juan Reynoso. El exentrenador de Cruz Azul asumió el cargo del equipo y fracasó rotundamente. Desperdició ocho partidos amistosos para nunca encontrar un once titular que funcione. Con solo dos puntos sobre 18 posibles, la federación apostó por Jorge Fossati para que continúe liderando el camino en las eliminatorias.

Una apuesta riesgosa

El director técnico uruguayo es un estratega calculador. Es un buen entrenador que a cualquier club a nivel sudamericano le puede sacar el jugo. Sin embargo, su contratación en la selección peruana era una apuesta riesgosa desde el inicio. Desde el 2023, es de conocimiento general que a Fossati solo le gusta jugar 3-5-2. Este dibujo táctico es poco usual para la selección peruana, ya que no cuenta con un volante creativo o enganche, y además tampoco cuenta con extremos.

Algunos de los nuevos elementos de la selección, como Grimaldo, Zanelatto y Bryan Reyna, son jugadores ofensivos de banda. Se limitan mucho sus posibilidades al no jugar con un esquema que les favorezca. Nuestros futbolistas no se terminan de adaptar de la mejor manera al 3-5-2, por más que el seleccionador insista con la idea.

A diferencia de Juan Reynoso, quien no tenía esquema, idea de juego, ni mucho menos un equipo titular, Fossati tiene claro cómo quiere jugar. Se prioriza el orden táctico y las líneas defensivas, con tres centrales que tienen su rol marcado. Los carrileros y las triangulaciones que puedan formar con los volantes interiores son cruciales para avanzar hacia el arco rival. El concepto está, pero es erróneo ya que no tenemos jugadores que se adecúen a todas las caracteristicas que pide el 3-5-2.

Nos falta inventiva en ataque y generar más situaciones de gol. Jugando sin extremos y sin sociedades por las bandas, se nos complica tener más peso en las acciones ofensivas que podamos generar. Si nuestro entrenador no abre los ojos y se da cuenta que en la selección se necesita más tiempo para que los jugadores se adapten a la nueva idea, entonces será muy tarde para nosotros. Nos encontramos a media eliminatoria y hasta ahora no ganamos ni un partido. La situación es crítica, e intentar lo mismo no garantiza resultados distintos.

La falta de gol se puede resolver si se encuentra la manera de solventar mejor las acciones de ataque en el área rival. Se debe cuidar la pelota en campo contrario, pero es importante realizar transiciones rápidas. Los jugadores deben ser más atrevidos y encarar. Para llevar el rendimiento de los jugadores a un nivel alto, se tienen que ubicar en sus puestos naturales. Jugar con extremos siempre ha sido una de las claves para Perú.

Cuestionables presencias

Otra de las deudas que deja esta Copa América es la selección de alguno de sus integrantes. Son muy cuestionables las presencias de Christian Cueva y Paolo Guerrero. Dos futbolistas que nos dieron tantas alegrías y serán siempre admirados por toda una hinchada, pero que hoy no muestran un rendimiento al nivel de una selección mayor de fútbol.

Cueva, sin club y sin ritmo de competencia, además de estar recién recuperado de una lesión grave a la cual no le prestó atención por casi toda una temporada. En el caso de Guerrero, juega en una liga de pobre nivel y ha participado en muy pocos partidos en lo que va del año. Su edad y su reciente recuperación de una nueva lesión han hecho que el nivel del Paolo que tuvimos en algún momento sea irreconocible. Hoy, no suman al equipo.

La selección debe volver a trabajar desde cero. Nuevo sistema y nuevos jugadores. En vez de llamar a los veteranos que ya alcanzaron su techo, es momento ideal de llamar a los que vienen desde atrás. Noriega, Paolo Reyna, Catriel Cabellos, Jefferson Cáceres, entre otros, esperan una oportunidad para mostrarse.

Ya no hay más amistosos antes de retomar las acciones de eliminatoria. No hay más tiempo que perder. Volvamos a la línea de cuatro que nos permitió tener laterales que se preocupen por cubrir sus sectores. Coloquemos a volantes extremos que ofrezcan velocidad y sociedades con los volantes del centro. Es momento de recuperar la idea del juego del ‘chocolate’ que tanto nos dio.

Es difícil pensar que una clasificación a la Copa del Mundo es posible. Hundidos en lo más hondo de la tabla y con un equipo muy flojo, es hora de aceptar el hecho que ir al próximo Mundial es casi imposible para Perú. El primer partido contra Colombia está a la vuelta de la esquina y las señales de un mejor juego son escasas.

Con todos los pronósticos en nuestra contra, no existe oportunidad mejor para intentar algo nuevo. Mantener una base de los pocos mundialistas que aún tienen gasolina y mezclarla con un talento hambriento como el de Sonne, Grimaldo, Reyna y Quispe. Si uno prueba siempre lo mismo, no puede esperar resultados distintos. Es ahora o nunca.

¿PODER? OFENSIVO

En sus últimos 9 partidos oficiales, Perú solo marcó un gol. Lo hizo Yoshimar Yotún ante Venezuela.

  • Paraguay 0 vs. 0 Perú (Fecha 1 Clasificatorias)
  • Perú 0 vs. 1 Brasil (Fecha 2 Clasificatorias)
  • Chile 2 vs. 0 Perú (Fecha 3 Clasificatorias)
  • Perú 0 vs. 2 Argentina (Fecha 4 Clasificatorias)
  • Bolivia 2 vs. 0 Perú (Fecha 5 Clasificatorias)
  • Perú 1 vs. 1 Venezuela (Fecha 6 Clasificatorias)
  • Perú 0 vs. 0 Chile (Copa América)
  • Perú 0 vs. 1 Canadá (Copa América)
  • Perú 0 vs. 2 Argentina (Copa América)

CLASIFICATORIAS AL MUNDIAL 2026

Lo que viene

Setiembre

  • Fecha 7: Perú vs. Colombia
  • Fecha 8: Ecuador vs. Perú

Octubre

  • Fecha 9: Perú vs. Uruguay
  • Fecha 10: Brasil vs. Perú

Noviembre

  • Fecha 11: Perú vs. Chile
  • Fecha 12: Argentina vs. Perú

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